Hace unos días tuve la suerte de poder disfrutar en el teatro y
centro cultural Fernán Gómez de Madrid de una exposición dedicada a los
llamados guerreros de Terracotta o guerreros de Xian.
Qin Shi Huang, Primer Emperador de la Gran
China, buscó la vida eterna, y la encontró a través de los Guerreros de
Terracotta después de su muerte. Éste joven emperador( pues comenzó a gobernar
con 13 años) mandó construir un ejército de unas 8000 figuras de guerreros de
arcilla (terracotta = arcilla moldeada) para que fueran enterradas con él
cuando éste falleciera. La idea del emperador era que enterrándose con éstas
figuras aún muerto seguiría teniendo tropas a su mando.
Hoy en día aún no se sabe cómo se
consiguieron hacer todas esas figuras en aquella época( 210-209 a.C), pues cada
guerrero es diferente al anterior. No existe ninguno doble, con lo cual se
descarta la posibilidad de que hubieran podido hacerlo con moldes. Parece que
el secreto de cómo consiguieron hacer 8000 figuras de 1,80 metros cada uno, de
diferentes características cada uno y en los años que tardó el emperador en
morir, murió con él.
Aquí dejo una foto de la exposición de los guerreros de Xian.
